Muchos estudios han indicado que las acciones del presente pueden repercutir en el futuro. En este caso, según un nuevo estudio publicado en la revista Pediatrics indica que los adolescentes que no duermen el tiempo adecuado podrían convertirse en pacientes cardíacos en el futuro.
¿Puede la falta de sueño afectar el corazón?
El insomnio está asociado con una serie de trastornos entre los que se encuentran enfermedades del sistema nervioso y la ansiedad. No obstante el reciente estudio publicado en Pediatrics sugiere que el corazón puede verse también afectado por la falta de sueño.
Esto según aseguran los especialistas, tiene mucho que ver con los hábitos de los jóvenes, entre ellos el tiempo prolongado que permanecen utilizando los aparatos electrónicos. Este hábito, suele ser responsable de la disminución del sueño.
Por lo que los especialistas, como Elizabeth Feliciano, líder del estudio, recomiendan a los padres limitar el uso de aparatos electrónicos con pantallas. Principalmente recomienda restringir el uso de televisores y las pantallas como Smartphone y tabletas después de ciertas horas.
Según Feliciano, estos artefactos son llevados a las habitaciones y afectan el sueño. Los adolescentes son una población muy conectada a la tecnología y muchos padres no son del todo conscientes, al igual que no lo son de las carencias de sueño de muchos jóvenes.
De este modo, la Doctora Feliciano recomienda eliminar cualquier presencia de pantallas de la habitación para mejorar la cantidad y calidad del sueño del los adolescentes. Esto podría ser de gran importancia para prevenir problemas futuros como señala el estudio realizado por esta especialista.
¿En qué consistió el estudio?
Estudios realizados anteriormente llamaron la atención de un grupo de especialistas liderados por la Dra. Elizabeth Céspedes Feliciano. Uno de ellos demostró que el sueño indebido aumenta las probabilidades de ser obeso.
Tras esos resultados, decidieron orientar este nuevo trabajo en descubrir si el insomnio de los adolescentes, además de afectar el peso, podía ser un factor de riesgo en el padecimiento de enfermedades cardíacas. Para ello requirieron de la participación de 829 adolescentes.
Los adolescentes participantes formaban parte de un estudio previo a largo plazo denominado “Proyecto Viva”. El Proyecto Viva consistía en seguir la vida de un grupo de mujeres, que fueron reclutadas en estado de embarazo y de sus hijos, cerca de 14 años después de su nacimiento.
Para realizar la investigación, los chicos, con edad promedio de 13 años, debían utilizar en la mano un sensor de movimiento que era colocado a la hora de dormir. La función del sensor era detectar la actividad que mantenían durante el sueño, es decir, cuanto se movían o si el sueño era quieto. La duración también era medida.
Los jóvenes debían permanecer con el sensor por un período de 7 días, alcanzando incluso los 10 días.
Resultados del estudio
Un grupo de jóvenes según las muestras arrojadas por el sensor dormían menos de 7 horas durante la noche. Otro grupo durmió menos e 7 horas y además de eso el sensor detectó inquietud durante el sueño y un grupo menor llegó a dormir 7 horas o más.
El tiempo de sueño promedio de sueño entre los jóvenes del estudio estuvo rondando las 7 horas diarias y el tiempo recomendable de sueño está por encima de las 8 horas. Según los investigadores más del tercio de los jóvenes estudiados durmió menos de las siete horas. Con esto se demostró que:
- Los jóvenes que dormían por 7 horas y con sueño muy activo o inquieto tuvieron resultados poco saludables, aumentando su peso corporal, lo que influenciaba en los niveles de colesterol; el HDL, estaba bajo. Además, la grasa corporal estaba por encima de lo debido y la presión arterial fuera de lo normal.
- por otro lado los jóvenes que durmieron menos tiempo pero sin fatigarse durante el sueño, tenían un estado de salud poco mejor que el grupo anterior. No obstante sus niveles de grasa corporal estaban altos. La presión arterial superaba los índices normales al igual que el colesterol.
Este hecho, según advierten los especialistas, puede ser muy dañino para el corazón. Elizabeth Feliciano, asegura, basándose n anteriores estudios, que la falta de sueño ocasiona los factores mencionados anteriormente y estos aumentan el riesgo de factores cardiológicos.