Desde que fue descubierto este mal afecta a por lo menos 500 estadounidenses al año. Esto según datos apostados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Ahora bien, un reciente caso ha devuelto a la palestra a esta enfermedad. Y es que de acuerdo a lo informado por el portal noticioso ABC News, un nuevo caso fue diagnosticado en la población de Tennessee. Se trata de Tony Gibson de 32 años de edad.
Una terrible enfermedad
Por sus siglas en ingles esta enfermedad es conocida como Creutzfeldt-Jakob (ECJ). Y científicamente es denominada encefalopatía espongiforme bovina. Básicamente puede afectar tanto al ganado vacuno como al hombre. A este último se le trasmite por la ingesta de carne contaminada.
Tanto en los animales como en los seres humanos la ECJ se caracteriza por deterioro mental muy acelerado. Esto se debe a que el cerebro se llena de agujeros. Esto hace que cuando se vea a través de un microscópico, se asemeje a una esponja.
Hasta ahora los científicos desconocen a ciencia cierta que causa la ECJ en el ganado. Sin embargo, han determinado que tanto en animales como humanos, esta suele tener un largo período de incubación. Incluso de hasta 30 años. Posteriormente aparecen los síntomas y el deterioro se acelera.
Entre los síntomas que puede presentar una persona afectada por esta enfermedad están:
- Cambios notables en el estado de ánimo. Puede presentar nerviosismo, ansiedad o apatía.
- Problemas de coordinación
- Contracciones musculares
- Ardores molestos y hormigueo en sus extremidades
- Demencia o confusión. Tiende a perder el sentido del tiempo y el espacio
- Depresión o psicosis
- Insomnio
- ceguera
Para estar seguro que una persona padece de la enfermedad de las vacas locas se requiere de una serie de análisis de laboratorio. E incluso estudios por imágenes.
Además de eso, es necesario que sea atendida por especialistas como neurólogos e infectólogo. Estos determinarán si efectivamente se trata de ECJ y harán las recomendaciones respectivas tanto al paciente como a sus familiares
El caso de Tennessee
El mencionado medio de comunicación reseñó que a Gibson de diagnosticaron la enfermedad debido a los olvidadizo que se volvía. De hecho según relató su esposa, Danielle Gibson, el hombre se perdía en la tienda de comestible. E incluso en su propia casa.
Esta situación, sumado varios síntomas que comenzó a presentar hace un año, llevó a que se le practicaran múltiples pruebas. Y tras varias visitas al neurólogo a Tony le diagnosticaron CJD.
No se ha descubierto cura
Tras el diagnostico, este hombre ha requerido de atención constante de enfermería. La razón de ello, es que hasta los momentos no se conoce cura para esta enfermedad. Así como tampoco ningún tratamiento que pueda retardar su avance.
De hecho, existe una lamentable estadística, de que una vez que las persona comienzan a padecer de ECJ, su deterioro es muy acelerado. Tanto así que la mayoría de los pacientes fallecen en el trascurso de un año
Es por eso que básicamente el tratamiento, una vez se hace el diagnostico se basa en cuidados de apoyo. Es decir se le brinda al paciente una atención hospitalaria especializada, de tal manera que sufra lo menos posible. Para ello se le puede administrar medicamentos para regular supresión arterial.
