Uno de los mayores problemas, que suelen padecer los enfermos de diabetes, es el pie diabético. Esta se ha vuelto la principal razón por la cual se hospitaliza a una persona diabética alrededor de todo el mundo. Por ello, muchas investigaciones se han centrado sobre este punto.
Principales problemas de una persona diabética
Los problemas en los pies, son de las afecciones más comunes padecidos por los diabéticos. La circulación se ve afectada de forma severa y los nervios, bastante dañados debido a la condición de la persona. El primero es debido a la mala circulación, lo que conduce con el tiempo, al daño de los nervios.
Estas condiciones eventualmente sólo traen más complicaciones a la persona diabética. Por ejemplo, se puede ver la aparición de articulación diabética del pie, o la artropatía de Charcot. Esta última es la causa más común de la deformidad del pie y la discapacidad en algunos.
Los posibles tratamientos para el pie de Charcot
Existen varios tratamientos que pueden resultar efectivos contra el pie de Charcot. Todos varían, y dependen en general de la atención preventiva a través de los ejercicios más adecuados. Algunos implicas inspecciones diarias de los pies, para prevenir la temprana malformación de la pierna.
Así se logra además una buena salud, y la prevención de otros posibles problemas, entre las cuales está incluida la enfermedad del pie. Se deben tomar en cuenta los datos sobre cuántos pacientes diabéticos padecen de esta condición. De esta forma se tomarían las medidas necesarias.
Causas de los problemas en los pies de los diabéticos
Los pacientes diabéticos tienen unos vasos sanguíneos más debilitados de lo normal. Como resultado se reduce la correcta circulación de la sangre en el pie. Esto es lo que promueve la debilidad en los huesos, las articulaciones, el tobillo y el pie, motivo por el cual se fracturan con mayor facilidad. Lo que aumenta los riesgos de fracturas en los huesos del pie.
Prevenciones para las lesiones en los pies de los diabéticos
En etapas tempranas se recurren a los yesos. Estos son utilizados para mantener los huesos del tobillo y del pie a salvo de desplazamientos o lesiones. Además, también ayudan a disminuir la hinchazón en el área. Sin embargo, esto limita mucho a los pacientes diabéticos de sus actividades rutinarias.
Se debe también, al hecho de que se ven afectados por la necesidad de mantener el yeso hasta la consolidación ósea. Esta puede durar hasta mínimo, 3 meses. Durante este tiempo, el yeso se suele reemplazar una vez a la semana o dos semanas por lo mínimo. Así se evita la contracción del tejido a medida que disminuye la inflamación.
Tratamientos especiales del pie de Charcot
A menudo requiere botas especiales para proteger el pie del estrés desigual, de las úlceras y otros posibles problemas. Cada paciente de diabetes con pie de Charcot debe contar con sus botas personalizadas. Estas sólo pueden ser utilizadas luego de que la inflamación ha disminuido notablemente, y los huesos se han consolidado.
Casos especiales del pie de Charcot
En algunos pacientes, la deformidad del pie, puede evitar el uso apropiado del calzado protector. En algunos casos, el uso del mismo puede aumentar el riesgo de la formación de úlceras; en tales casos, lo mejor que se puede hacer es recurrir a la cirugía, para poder contrarrestar los problemas de la condición.
