En consecuencia, se han estudiado y planteado diversas prevenciones para la demencia. Siendo una la más recomendada el llevar una alimentación balanceada para así disminuir el riesgo de padecerla.
Sin embargo, un estudio realizado comienza a cuestionar la idea de que llevar una dieta saludable puede ayudar a prevenir dicha enfermedad. Los resultados de esta investigación fueron publicados por la revista de la Asociación Médica Americana.
¿De qué trata dicha investigación?
Diversos investigadores europeos siguieron por el lapso de 25 años a más 8.200 adultos mayores. Con eso observaron y estudiaron sus hábitos alimenticios para saber si eso influye en las probabilidades de sufrir demencia.
Los resultados arrojaron que las personas que comían frutas y verduras no tenían menos probabilidades sobre los que ingerían dulces y carne. Cuestionando de esa forma estudios previos que afirmaban que una dieta podía ayudar a combatir la demencia.
Y es que en esos años de seguimiento, alrededor de 344 personas fueron diagnosticadas con Alzheimer, señaló la investigadora principal Tasnime Akbaraly. Y resaltó además que las tasas fueron similares entre las personas con “buenas” y “malas” dietas.
Los estudios contrastados…
La posibilidad de que la dieta saludable ayudará a la prevención de la demencia surgió a través de diversas investigaciones. En ellas se planteaba que la alimentación saludable para el corazón producía menores posibilidades de tener deterioro mental.
Por tal motivo, varias asociaciones hoy en día promueven que las personas adopten ese tipo de dieta. Una de ellas y que está sumada en su totalidad con la causa es la Asociación de Alzheimer.
No obstante, esas investigaciones produjeron cortos seguimientos a las personas, poco menos de 10 años. Por lo que muchos comenzaron a cuestionar si los resultados eran veraces.
¿Qué dijo la Asociación de Alzheimer sobre la investigación?
El director de programas científicos y divulgación para la Asociación de Alzheimer, Keith Fargo fue el encargado de hablar sobre el caso. Señalando que no desea que nadie comience a pensar que llevar una dieta saludable puede ser inservible.
Asimismo, aseguró que no se puede confiar en investigaciones basadas netamente en la observación porque no se evalúa la causa y efecto. Y que para tener respuestas más congruentes se deben realizar ensayos clínicos. Esto debido a que son esos los que asignan y comprueban si una persona debe adoptar un nuevo estilo de vida.
Debido a esto, la Asociación de Alzheimer está patrocinando ensayos para corroborar los efectos de una dieta junto a otras medidas. Entre esas se encuentra la práctica de ejercicios y actividades que estimulen la mente. Dichos ensayos estarán orientados en adultos mayores que posean mayor riesgo de sufrir un deterioro mental.
Opinión de la investigadora
La investigadora Tasnime Akbaraly del Instituto Nacional de Investigación francés INSERM dio su opinión. Ella señaló que efectivamente sus hallazgos no significan que la dieta no deba ser importante.
Por el contrario menciona que una dieta es esencial para una salud tanto física como mental. Además, Akbaraly observó en un estudio previo que adultos de mediana edad con una dieta saludable tenían menos riesgo de sufrir depresión.
Conclusión
Los nuevos hallazgos que arrojó esta investigación dejan diversas preguntas sin respuestas. Entre esa una que la Asociación de Alzheimer posee, que es qué sucedería si la dieta se combina con el ejercicio. De allí que los científicos consideran que es importante seguir con las investigaciones para llegar a respuestas contundentes.
De igual forma, los resultados del estudio en ningún momento vienen a significar que la dieta es irrelevante. Ya que lo se consume a diario puede contribuir positiva o negativamente en la salud general, tanto física como mental.